El volumen de datos generado aumenta de forma exponencial cada año: si en 2022 se crearon, capturaron y consumieron 97 zettabyte*, se espera que la cifra aumente hasta los 181 zettabyte en 2025. La única manera de explorar estas inmensas bases de datos es mediante la Inteligencia Artificial (IA).
De esta forma, se genera la unión del Big Data y la Inteligencia Artificial, resultado de una sinergia que va a transformar numerosos aspectos de la sociedad moderna. Este matrimonio tecnológico ha generado un impacto significativo en una variedad de campos, desde la atención médica y la investigación científica hasta el marketing y las finanzas.
En el corazón de esta convergencia está la capacidad de la IA para procesar y comprender datos a una escala que supera con creces las capacidades humanas. Las técnicas de aprendizaje automático y la minería de datos permiten a los sistemas de IA identificar patrones, tendencias y correlaciones ocultas dentro de enormes conjuntos de datos, que podrían pasar desapercibidos para los análisis tradicionales.
Por ejemplo, en el ámbito empresarial, la IA y el Big Data se combinan para impulsar estrategias de marketing más efectivas y personalizadas. Al analizar grandes volúmenes de datos de clientes, incluidas las interacciones en redes sociales, historiales de compras y preferencias de productos, las empresas pueden obtener una comprensión más profunda de sus clientes y anticipar sus necesidades.
En el campo de las finanzas, la IA se utiliza para predecir tendencias del mercado, detectar fraudes y optimizar carteras de inversión. Los algoritmos de IA pueden analizar datos financieros en tiempo real de una manera que sería imposible para los humanos, identificando patrones sutiles y señales que podrían indicar cambios en el mercado o actividades fraudulentas.
Además, la IA y el Big Data están transformando la forma en que se abordan los desafíos sociales y ambientales. Desde la predicción y mitigación de desastres naturales hasta la gestión de recursos naturales y la planificación urbana, estas tecnologías están siendo utilizadas para abordar algunos de los problemas más apremiantes de nuestro tiempo.
Sin embargo, esta convergencia también plantea desafíos significativos, incluida la privacidad de los datos, la seguridad cibernética y los principios éticos en su uso. Por lo que, es fundamental abordar estas preocupaciones de manera proactiva para garantizar que la IA y el Big Data se utilicen de manera ética y responsable.
Todo esto, ha motivado a la Universidad Anáhuac de Puebla, a proponernos un nuevo programa de Maestría en IA y Big Data. Programa que nos ha sorprendido por su frescura y que será único en su género en el país, pues va a integrar estos dos fascinantes mundos tecnológicos con un enfoque humanista centrado en la persona, en sus derechos y responsabilidades sociales.
Tendremos que seguir de cerca esta nueva formación de especialización que la Universidad Anáhuac de Puebla nos estará ofreciendo a partir de agosto 2024.
* 1 zettabyte (zb) = 1,000,000,000,000,000,000,000 bytes,
* 1 byte puede almacenar una letra o un número.
Dr. en Ciencias Cognitivas (Instituto Nacional Politécnico de Grenoble-INPG, Francia) Maestro en Ciencias Computacionales (CENIDET/TecNM-México). Profesor en la Universidad Rey Juan Carlos (URJC), de Madrid, España y Profesor en la Universidad Anáhuac Puebla. Investigador en el área de la Inteligencia Artificial.