Los nuevos modelos en las cadenas de suministro se caracterizan por una mayor demanda de generación de valor en cada uno de los eslabones que las componen; esto ha desembocado en la creciente transferencia de la responsabilidad de Investigación y desarrollo e innovación (I&D+i) por parte de las empresas que ofrecen productos y servicios a los usuarios finales, a cada uno de los integrantes en la cadena de suministro, de tal manera que ello les permita concentrarse en su core process para la generación de valor; y en este contexto, son las empresas con Capacidades de Innovación sólidas las que lideran la cadena de valor y determinan las reglas del juego en los negocios y la dirección tecnológica a seguir. Ante este escenario, existen diversos sectores productivos cuya cadena de suministro presenta dificultades para dar respuesta a estas responsabilidades, debido a factores como la falta de estrategias para la Innovación tecnológica por parte de algunos de los integrantes, a los que se les ubica como proveedores de poco valor o simples por sus capacidades de innovación limitadas, esto no sólo pone riesgo su permanencia en la cadena de valor, sino también a la competitividad de las grandes marcas que suministran el producto final al usuario, pues es importante considerar que existen sectores en los que su ventaja competitiva se sostiene hasta en un 70% en su cadena de suministro.
Dado lo anterior, es de gran importancia que las organizaciones incrementen sus Capacidades de Innovación, entendiendo éstas como las habilidades organizacionales para la creación de nuevos productos, procesos, mercados y servicios inherentes al producto, integrando la creación, el desarrollo y la optimización de recursos para la innovación, las mejoras importantes en las tecnologías actuales para crear nuevas tecnologías, así como procesos de I&D centrados en la calidad y la sustentabilidad, para la innovación y mejor desempeño en el futuro. Al respecto, la literatura formal especializada revela que existen diversos factores organizacionales que impulsan a las Capacidades de Innovación, tales como la capacidad de relación y vinculación, la inteligencia competitiva o la vigilancia del contexto sólo por citar algunos. Sin embargo, es necesaria la realización de investigaciones que validen tales argumentaciones teóricas.
En este sentido, los hallazgos de recientes investigaciones empíricas en las que participa personal académico de la Universidad Anáhuac Puebla, sostienen que existe una fuerte relación de factores de la gestión organizacional relacionados con criterios de Innovación Abierta, con las Capacidades de Innovación Organizacionales, siendo el despliegue de la Estrategia y Gestión para la Innovación, la Cultura Organizacional Innovativa, y la Gestión del Conocimiento e Ideas, los factores de mayor impacto positivo en las Capacidades de Innovación, proponiendo así nuevos modelos de gestión de la innovación como alternativas de solución.
Es así como, en la Maestría en Ingeniería para la Dirección de Operaciones de la Universidad Anáhuac Puebla, nos ocupamos por mantenernos en la frontera tecnológica de las nuevas tendencias, metodologías y herramientas utilizadas en contextos de la industria global para la mejora, con una visión directiva.
Profesor de la Escuela de Ingeniería y Actuaría
Coordinador académico de la Maestría en Ingeniería para la Dirección de Operaciones