01 de diciembre, 2021
Cuando escuchamos hablar de Educación de Calidad, viene a nuestra mente la Declaración del Milenio que en el año 2000 hiciera la Organización de las Naciones Unidas y ante la cual los líderes de 189 países establecieron su compromiso para coadyuvar con el cumplimiento de los objetivos ahí establecidos.
En dicha declaración ya se hacía evidente que, desde inicios de siglo, había grandes problemáticas que atender en los ámbitos de la salud, economía, educación, ambiente, cultura de género y la política global orientada a fomentar el desarrollo, para contribuir en la satisfacción de las necesidades humanas más urgentes y en la recuperación de los derechos fundamentales con que todos los seres humanos deben contar.
Y aunque el trabajo que a nivel mundial se ha venido realizando en el marco de los ocho Objetivos de Desarrollo del Milenio, ha mostrado avances positivos tanto en países desarrollados como en países en desarrollo, las desigualdades persisten y las contingencias que afectan al planeta, como la crisis sanitaria que produjo el SARS-CoV-2, acentúan cuestiones como la pobreza extrema, el abandono escolar y el cambio climático, entre muchos otros.
Ante retos tan contundentes, para las Instituciones de Educación Superior, comprometidas con la formación de profesionistas competentes y capaces de insertarse positivamente en el campo profesional, es fundamental que sus estudiantes desarrollen la sensibilidad para detectar las necesidades presentes en su entorno social y proponer soluciones, desde un liderazgo ético de acción transformadora.
Un ejemplo en el que se refleja la responsabilidad antes referida, lo podemos observar en el campo educativo, desde el que se construyen alternativas para la educación personalizada de los alumnos, con la finalidad de generar iniciativas instruccionales que ayuden a “…garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos…” (UNESCO, 2016, Pág. 6).
Es por ello que hoy en día algunas iniciativas vanguardistas dirigidas a la capacitación docente y el diseño instruccional de cursos para la educación básica, media superior y superior, se apoyan en las herramientas TIC, recuperando el enfoque de la educación personalizada fundada en el Mastery Learning, así como en la estructuración de caminos de dominio que guíen a los estudiantes para avanzar hacia el logro de los aprendizajes esperados, de acuerdo con sus propias conocimientos y habilidades desarrollados.
En la base de dichas propuestas se encuentra un tipo de enseñanza sistemática, orientada a identificar oportunamente las dificultades de aprendizaje de cada estudiante para acercarle las condiciones necesarias que le permitan alcanzar el dominio requerido en el aprendizaje.
La implementación del modelo de educación personalizada requiere además del trabajo que realizan las universidades en el cumplimiento de sus funciones sustantivas (docencia, investigación y extensión del conocimiento), de la colaboración entre investigadores educativos y desarrolladores de plataformas de gestión del aprendizaje (Learning Management Sistems), softwares y aplicaciones para la implementación de sistemas de respuesta electrónica (SRE).
Sin duda alguna la intervención pedagógica de los docentes resulta fundamental, debido a que son ellos quienes están a cargo de diagnosticar las necesidades de sus estudiantes, diseñar alternativas instructivas con actividades correctivas que permitan remediar los problemas de aprendizaje detectados o bien, planear actividades de enriquecimiento que ofrezcan la oportunidad de ampliar y expandir el aprendizaje de sus estudiantes; pero sobre todo que estén dispuestos a brindar realimentación sistemática a lo largo de la secuencia instructiva. Como respuesta a los retos planteados, la Universidad Anáhuac Puebla cuenta con la Maestría en Educación y las especialidades en Docencia e Innovación, Dirección y Coaching Educativo e Inclusión Educativa, cuyo objetivo es formar especialistas en educación que, a través de la propuesta de proyectos humanos y éticos, favorezcan una educación integral y personalizada.
Dra. Victoria Amneris Delgadillo Licea
Post-Doctora en Sistematización de la Teoría Educativa, Doctora en Educación, Maestra en Enseñanza Superior, Maestra en Excelencia Educativa, por la Universidad La Salle y Master en Psicopedagogía Clínica por la Universidad de León en España, Especialidad en Entornos Virtuales de Aprendizaje por OEI y Virtual Educa, y Licenciada en Psicología Educativa por la Normal del Instituto Anglo Español; En la actualidad la Post Dra. Delgadillo es titular de la Cátedra Semper Altius Anáhuac de Formación Integral, investigadora y docente de posgrado en la Facultad de Educación de la Universidad Anáhuac Norte y en la Escuela de Humanidades de la Universidad Anáhuac Puebla.
