¿POR QUÉ NECESITAMOS EL NEUROAPRENDIZAJE?
En la era actual, marcada por rápidos avances tecnológicos y cambios constantes, la necesidad de adaptarnos y aprender de manera efectiva se ha vuelto crucial. El neuroaprendizaje emerge como una herramienta invaluable en este contexto, ya que se sumerge en la profunda comprensión de cómo funciona nuestro cerebro durante el proceso de aprendizaje. Al entender los principios del neuroaprendizaje, podemos optimizar nuestras estrategias educativas para potenciar la retención y aplicación del conocimiento.
La conexión entre las emociones y el aprendizaje es esencial para abordar la complejidad de la mente humana. Las emociones desempeñan un papel fundamental en el proceso de aprendizaje, ya que influyen en la motivación, la atención y la memoria. Un enfoque integral que integre la gestión emocional con estrategias neuroeducativas puede mejorar significativamente la calidad del aprendizaje y fomentar un ambiente educativo más enriquecedor.
En respuesta a la pregunta, necesitamos el neuroaprendizaje para desbloquear el potencial completo de nuestro cerebro y maximizar las oportunidades de aprendizaje. Al comprender la intersección entre la educación emocional y el funcionamiento cerebral, podemos cultivar un entorno educativo que no solo transmite conocimientos, sino que también promueva un aprendizaje duradero y significativo.
IMPORTANCIA DE LA NEUROCIENCIA EN LA EDUCACIÓN
La neurociencia desempeña un papel fundamental en la educación actual, ya que permite comprender cómo aprende el cerebro y aplicar este conocimiento para mejorar el proceso de enseñanza. La neuroeducación, que combina la psicología, la pedagogía y la neurociencia, pone la ciencia al servicio de los procesos educativos, creando un amplio abanico de enfoques para enseñar y aprender de manera más productiva. Este enfoque interdisciplinario no solo valida ciertas prácticas pedagógicas, sino que también proporciona un conocimiento crucial que debe ser tenido en cuenta en el ámbito educativo.
La neurociencia en la educación no solo aporta una comprensión más profunda de cómo aprende el cerebro, sino que también valida y enriquece las prácticas educativas. Al integrar el conocimiento neurocientífico con la pedagogía y la psicología, se abren nuevas oportunidades para mejorar el proceso de enseñanza y aprendizaje, lo que resulta fundamental en un contexto marcado por rápidos avances tecnológicos y cambios constantes.
La importancia de estudiar los principios de neurociencia en una sociedad pospandémica, globalizada y altamente influenciada por la digitalidad radica en la necesidad de comprender cómo el cerebro humano aprende y se adapta a estos nuevos contextos. La neurociencia educativa permite aplicar el conocimiento sobre el funcionamiento cerebral al ámbito educativo, lo que resulta fundamental en un mundo en constante cambio para adaptar los métodos de enseñanza a las demandas de una sociedad cada vez más demandante donde la educación se ha visto desafiada a adaptarse a nuevas modalidades de enseñanza.
UN NUEVO PARADIGMA EN EL APRENDIZAJE
De acuerdo con Francisco Mora, doctor en medicina por la Universidad de Granada, doctor en neurociencias por la Universidad de Oxford, profesor de fisiología humana en la Universidad Complutense de Madrid y profesor adscrito en la Universidad de Iowa, “el cerebro sólo aprende si hay emoción.” Esta afirmación constituye un nuevo paradigma para todos los agentes del ámbito educativo. Es necesario repensar el proceso educativo y transformar la práctica educativa.
En la Universidad Anáhuac Puebla somos agentes de transformación y por eso hemos diseñado un diplomado que busca proporcionar los saberes cognitivos y procedimentales en aquel agente educativo que será el protagonista del gran cambio. El objetivo del Diplomado en Neuroaprendizaje es: analizar las nuevas propuestas para potenciar el aprendizaje y la memoria mediante la comprensión del funcionamiento cerebral, con base en los últimos descubrimientos de las neurociencias y mediante herramientas que permitan aprender de manera efectiva.
Y para contribuir al compromiso social, parte fundamental de nuestra esencia universitaria, contamos con un programa de becas como parte de la formación integral de líderes de acción positiva. El neuroaprendizaje es una estrategia indispensable de liderazgo para mejorar la calidad de la educación del siglo XXI.
Coordinador de la Maestría en Educación